Hace una semana me mandaron una tarea: Que cada dia recordara mis flores con alegría.
Estuve pasando por un tiempo lleno de insatisfacción personal. Ya he logrado todo lo que he querido hasta ahora (titulación, independizarme, etc) y la pregunta que me daba vueltas en la cabeza era y ¿ahora qué?
Me había dado cuenta que con el tiempo algunas personas de mi entorno minimizaron mis esfuerzos, y me hicieron sentir mal.
Con el tiempo me di cuenta de que a pesar de todos mis esfuerzos aun no cumplía con el perfil para ese trabajo que me gusta tanto... y que aun no estoy donde quisiera estar.
Con el tiempo empecé a escuchar mas exigencias del mundo: que debes estudiar un diplomado, una maestría, un doctorado, una especialización, una segunda carrera, aprender inglés, francés, chino mandarín, viajar por todo el mundo, trabajar en el exterior, etc.
Con el tiempo empezaron a compararme con otras personas mas jóvenes que a mi edad están haciendo mas cosas que yo.
Con el tiempo me di cuenta que los arribistas llegan a la cima mas rápido que uno. Que las varitas son tan mágicas. Pero ¿Qué es la cima si no disfrutas el proceso y el camino?
Mis flores se habían marchitado.
¿Qué son mis flores?
Son mis logros, mis sueños realizados, mis metas cumplidas, y aunque aun hay muchas mas por cumplirse debo sentirme contenta por las que ya tengo.
Son mis logros, mis sueños realizados, mis metas cumplidas, y aunque aun hay muchas mas por cumplirse debo sentirme contenta por las que ya tengo.
¿Donde estuve hace 5 años?
¿Donde estoy ahora?
Si me pongo a reflexionar en estas dos preguntas, el camino ha sido arduo lleno de esfuerzos y sacrificios, lleno de lágrimas, de cansancio, de perseverancia y mucha dedicación. Este arduo camino solo yo merezco aplaudirlo con toda la fuerza de mi corazón.
¿Donde estoy ahora?
Si me pongo a reflexionar en estas dos preguntas, el camino ha sido arduo lleno de esfuerzos y sacrificios, lleno de lágrimas, de cansancio, de perseverancia y mucha dedicación. Este arduo camino solo yo merezco aplaudirlo con toda la fuerza de mi corazón.
Hace 5 años no sabia ni qué iba a ser con mi vida, hace 10 años no tenia ni idea de que lograría todo lo que he logrado hasta ahora.
Soy una sobreviviente. No me da pena decirlo y tampoco me victimizo. Es mi historia. Es lo que me tocó vivir. Por eso he luchado por vivir y disfrutar cada día de mi vida, los pequeños detalles, las pequeñas alegrías.
Sobreviví al bullying, sobreviví a los problemas familiares, sobreviví al cambio brusco de ciudad, sobreviví a un desorden alimenticio, sobreviví a la escasez económica, sobreviví a la explotación laboral, sobreviví a las malas relaciones, sobreviví a la depresión, sobreviví a la falta de educación universitaria, trabajé y estudié al mismo tiempo hasta terminar todo. El sueño de un título era inalcanzable y LO LOGRÉ.
Lo logré por mi propio esfuerzo y dedicación y por esta incansable FE que me sostiene cada día.
En todo mi camino DIOS ha sido la FUERZA DE MI CORAZÓN.
Ahora me encuentro regando mis flores cada mañana. Dándoles mucho amor y cariño. Ya están recobrando vida, ya se ven mas lindas desde la ventana de mi alma.
Nunca olvides de donde Dios te ha sacado y donde estas ahora. Nunca creas todo lo que el mundo diga. No permitas que nadie te haga sentir menos. Aléjate de aquellos que no te valoran y no saben quien eres realmente. No tengas miedo de seguir dando pasos, de seguir tocando puertas, no tengas vergüenza de tu historia, de las cosas que haz pasado. Sigue adelante mas FUERTE que nunca. Nunca estas solo! Nunca estas sola! Solo levanta la mirada y recuerda a nuestro creador, que si estas aquí es porque existe un gran propósito con tu vida. Que sus planes son mejores que los nuestros. Que él nos conduce hacia un destino glorioso. La historia de tu vida sigue siendo escrita. No te olvides de tus FLORES. RECUERDA TUS FLORES SIEMPRE CON ALEGRIA Y VE POR MÁS.
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